Un albergue para menores de Guatemala fue arrasado ayer por un incendio que dejó al menos 20 jóvenes muertas y 40 heridas.
Cuerpos cubiertos con sábanas azules y pedazos de colchones quedaron en lo que parecía un dormitorio del sitio que recibía a menores que fueron víctimas de abuso, que perdieron su hogar o que cumplieron alguna sentencia y no tenían a dónde ir.
Decenas de familiares esperaron desde la mañana del miércoles fuera del albergue en espera de alguna noticia.
La vocera del Ministerio Público, Julia Barrera, informó por la tarde que todas las víctimas son mujeres y menores de edad. Diecinueve fallecieron en el incendio y una más en el hospital por las heridas.
El secretario de Bienestar Social de la Presidencia de Guatemala, Carlos Rodas, dijo por su parte que 41 adolescentes y jóvenes, de entre 13 y 17 años, fueron trasladadas a dos hospitales de la capital con quemaduras de segundo y tercer grado.
Algunos jóvenes del albergue Hogar Seguro Virgen de la Asunción, localizado en las afueras de la ciudad de Guatemala, se amotinaron el martes como parte de un plan de algunos para escapar, según Rodas. En el lugar, con sobrepoblación, se habían presentado quejas de abusos y malas condiciones
“Algunas de las adolescentes le prendieron fuego a las colchonetas”, dijo el funcionario. “No evadimos responsabilidades, las asumimos, pero no podemos recuperar esas vidas”.
Rodas dijo que el lugar tenía capacidad para 500 personas, pero albergaba por lo menos a 800.
Una adolescente de 15 años que fue llevada al Hospital Roosevelt para ser atendida de heridas menores, dijo a The Associated Press que la tarde del martes comenzó un motín para escapar. Algunos jóvenes, incluidos mayores de edad que aseguró vivían ahí, entraron a la zona de mujeres. Ella, dijo, salió y se refugió en el techo del dormitorio con otras compañeras.
