Agencias
Informe denuncia una práctica generalizada y sistemática adaptada a las demandas del conflicto
BOGOTÁ. El reclutamiento de niños y adolescentes continúa siendo una práctica generalizada por parte de los grupos armados ilegales de Colombia, que los someten a abusos sexuales y los usan como carne de cañón en el conflicto armado del país, denunció un informe, que agregó que más de siete mil 400 menores de edad fueron las víctimas.
Colombia firmó en 2016 un acuerdo de paz con la desmovilizada guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) para poner fin a una confrontación de más de medio siglo que ha dejado 260 mil muertos y millones de desplazados, lo que permitió reducir los asesinatos, las masacres y los ataques a la infraestructura económica.
Pese a la reducción de la violencia, que permitió la reincorporación a la sociedad de unos 13 mil exintegrantes de las FARC que conformaron un partido político, el reclutamiento de menores continuó por grupos armados, incluyendo los disidentes que se apartaron del acuerdo de paz.