“Oficial Mañoso”, se construye Plaza Comercial; pero para las viudas de ex empleados municipales “no hay dinero”

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*Tampoco para Pensionados, Jubilados e Incapacitados, solo para Héctor Reyna y para “La Borrega Corrupta”

Alejandro Mares Berrones

Es altamente prepotente con los empleados municipales, principalmente con pensionados, jubilados e incapacitados.
Se trata de Héctor Rafael Reyna Massu, “El Oficial Mañoso”, así le apodan a este lenón venido a menos y ahora funcionario público, quien presume de ser el subordinado consentido de Mario López, “La Borrega Corrupta”, a tal grado que repitió en el cargo, por el nivel de complicidad que tiene con el edil municipal.
Héctor Reyna, ante sus incondicionales presume que ni síndicos ni regidores lo pueden correr, porque él hasta le compra con dinero del pueblo, el alimento para los caballos finos del alcalde, esos que tiene en Texas.
 El pasado 2 de mayo, la Asociación de Pensionados, Jubilados e incapacitados de Matamoros, fueron objeto de maltratos por parte de este nefasto funcionario municipal y no es la primera vez.
Los exempleados municipales que hoy encabezan esa asociación, cuyos dirigentes son los ex policías Arturo Padilla, Jesús Andrade, José Navar y José Angel Rangel, solo le pedían a Héctor Reyna, que los tratara con justicia, pero este no los quiso recibir en su oficina, al contrario salió al pasillo del segundo piso del Palacio Municipal, solo para maltratarlos…
“Fue muy prepotente, por eso pedimos su renuncia”, dijo Padilla.
Los ex empleados municipales optaron por manifestarse frente a la presidencia municipal y exigirle a “La Borrega Corrupta” que ya no apadrine al nefasto Oficial Mayor Héctor Reyna Massu y exigieron su renuncia, por prepotente.
Los ex empleados municipales pidieron  el aumento del 8 por ciento al salario, a partir del 1 de enero de este año con retroactivo; así como 250 pesos en vales de despensa y 6 primas de antigüedad para sus compañeros:
Manrique Arriaga Fuentes, Martín Ramos Bocanegra, Guillermo Ramos Bocanegra, Ignacio Zarate Muñoz, Raymundo García Rodríguez y David Ramírez de la Rosa.
Además, pensión para viudas o apoyo por tres años o hasta que la viuda fallezca de mil 700 pesos en vales de despensa y siete mil 810 pesos de pensión, de sus compañeros fallecidos: Juan Antonio de León Hernández, Ventura López Reyes, Raúl Cardona Ceniceros, Agustín Vázquez Hernández y Genaro Olivares Zamora.
Los pensionados, jubilados e incapacitados, solo pidieron lo que en justicia merecen, pero fueron tratados con prepotencia y malos tratos por el nefasto Oficial Mayor Héctor Rafael Reyna Massu.

Ni los primos incomodos, se explican por qué “El Oficial Mañoso” sigue en el cargo

Nadie se explica en Presidencia Municipal, porque “La Borrega Corrupta”, le soporta esa actitud al nefasto funcionario, ni siquiera los primos incomodos del alcalde, Alejandro “El Pollo” Cisneros y Ernesto Danache, actual secretario de Servicios Públicos Municipales, una de las áreas del Gobierno de Matamoros por donde escurre mucho billete…
Pero ya hablaremos de los primos incomodos de “La Borrega Corrupta” en otra ocasión; el caso es que Héctor Reyna ya lleva más de tres años como Oficial Mayor y se ha enriquecido, ya está igual que el alcalde Mario López.
Según datos de la Plataforma Nacional de Transparencia, “El Oficial Mañoso”, está identificado con el número de empleado 19220845 y el digito 132 como clave o nivel del puesto, así como con un sueldo mensual de 29 mil 400 pesos y ahora Héctor Reyna Massu, después de años de tener una propiedad por la calle Sexta entre Iturbide y avenida Las Américas, donde en algún tiempo estuvo el Bar “Hector`s”, ahora construye una plaza comercial; que ha edificado en días; pero para los Pensionados, Jubilados, Incapacitados y Viudas no hay dinero, ni medicamento para sus achaques.
Y claro que la está construyendo a todo lujo, al principio, durante el anterior gobierno de “La Borrega Corrupta”, utilizaba la vieja construcción para almacenar las compras adulteradas que salieron de las arcas municipales, por eso no le cuadran las cuentas a Mario López, y eso que solo le ha auditado la ASE y la ASF la cuenta pública del 2020, donde andan más de 100 millones de pesos de una nómina inflada; sino fuera por la Contralora Municipal, mínimo el Oficial Mayor ya estaría en prisión…
Héctor Reyna Massu, es tan sinvergüenza, que sin escrúpulos, utilizó la epidemia del virus del Covid para hacer negocio, allí donde hoy construye su plaza comercial, en su entonces vieja construcción que ya derrumbó, para hacer una nueva, almacenaba las compras infladas de gel antibaterial, guantes  de plástico y de gamuza,  overoles desechables, en fin todo aquello que como buen contador egresado del Tecnológico de Monterrey pudiera maquillar  y convertirlo en ganancias para sus bolsillos y claro para su patrón.
Ahora sí, querido lector, usted se ha de explicar porque el alcalde Mario López “La Borrega Corrupta”, protege a Héctor Reyna, quien en su declaración patrimonial rendida el 31 de mayo de 2021, dijo ganar anualmente como funcionario público un millón 91 mil 867 pesos…
Luego entonces de dónde está saliendo la inversión millonaria de la Plaza Comercial que construye allí en la Sexta, muy cerca de la Fiscalía General de la República, ¿a poco es enriquecimiento ilícito?, y es que por la Oficialía Mayor fluye gran parte del presupuesto, desde el gasto corriente, hasta lo que se compra o paga por toda clase de servicios o productos y es allí donde el contador Héctor Reyna le mete mano a la caja de las galletas.
Ya es un secreto abierto, la forma de operar del “Oficial Mañoso”, quien con un sueldo mensual de 29 mil pesos construye su Plaza Comercial utilizando los servicios de la Planta Asfalto de Matamoros, de Ernesto Andrade Olivares y de Ramón Humberto Sampayo Zuazua; además de remodelar los interiores de su residencia ubicada en el Fraccionamiento Río, Segunda Sección, la que se ubica por la calle Venecia…
Dicen los vecinos de ese Fraccionamiento que pidieron el anonimato, que Héctor no se quiso quedar atrás y mando remodelar toda la residencia en sus interiores e incluso hasta las cocheras las dejó a todo lujo, nomás para que vieran en que trabaja el muchacho.