Alejandro Mares Berrones
Después de la extradición de Jaime González Durán, “El Hummer”, un ex jefe de plaza en Reynosa de los Zetas; la defensa legal del ex gobernador de Tamaulipas, Eugenio Hernández Flores, inició una campaña mediática, con declaraciones y conferencias de prensa para decir que su cliente es “inocente”.
Declararon que la Fiscalía Anticorrupción de Tamaulipas, le había fabricado delitos al ex gobernador y que han ganado una serie de amparos en los tribunales y que Eugenio debería estar en libertad.
Hasta el gobernador Américo Villarreal, entró en defensa de su ex jefe Hernández Flores, y criticó a los jueces que resolverán si Eugenio enfrenta en libertad, el proceso penal de operaciones con recursos de procedencia ilícita que le queda pendiente en México.
Que no diga Eugenio que Américo no es agradecido, pues una de las primeras acciones del actual gobernador de Tamaulipas, fue la de no ratificar al magistrado del Poder Judicial del Estado, Horacio Ortiz Renán, “por no ser honorable”.
Lo que pasa es que Ortiz Renán y el Fiscal Anticorrupción Raúl Ramírez Castañeda, tuvieron mucho que ver para que Hernández Flores fuera a parar a la cárcel, aunque fue el gobierno de Enrique Peña Nieto, quien autorizó su extradición desde el 2018 a los Estados Unidos.
Por cierto, el Fiscal Anticorrupción de Tamaulipas, saltó como tapón de sidra de ese puesto por reprobar los exámenes de control de confianza del Centro Nacional de Inteligencia, que dirige un amigo de Américo Villarreal y de AMLO, o sea, el General Audumaro Martínez Zapata.
El Fiscal General de Tamaulipas, Irving Barrios Mojica, sesudamente antes de verse salpicado, notificó tal situación al Congreso Local, para que sea el legislativo quien nombre al nuevo Fiscal Anticorrupción.
Lo anterior, solo es el preámbulo de la urgencia que traen amigos y defensores de Eugenio para que este salga de prisión, como una víctima del anterior gobierno de Cabeza de Vaca; pero el tema es que los abogados de Hernández Flores se negaron hablar sobre la extradición del ex gobernador hacia los Estados Unidos.
Y es aquí donde está el meollo del caso de Eugenio Hernández Flores, la INTERPOL México no ha dicho que la extradición del ex gobernador se haya cancelado, por lo que se supone sigue avanzando sin ningún problema.
Y como se señaló en el primer párrafo, “El Hummer”, fue jefe de plaza de Los Zetas, en Reynosa y Miguel Alemán, en los años (2005-2010) en que Eugenio fue gobernador de Tamaulipas.
Y es que extraoficialmente se sabe que “El Hummer”, podría aportar información contra el ex gobernador de Tamaulipas, para librarse de la cadena perpetua.
Curiosamente desde la semana pasada en que este narcotraficante fue enviado a Estados Unidos, la presión en los medios contra los jueces, arreció para que Hernández Flores recobre su libertad.
Claro, que sería mera coincidencia; si el ex gobernador quedará libre, se iría de vacaciones a un país que no tenga extradición, así como le hizo Tomas Yarrington, aunque al final terminó en una prisión de alta seguridad de USA.
Pero resulta que “El Hummer”, el 21 de octubre de este año, un día después de su extradición, compareció en Washington y es muy probable que ante el principal Tribunal del Distrito de Columbia aporte información contra Eugenio Hernández Flores y con ello librarse de la Cadena Perpetua a la que se enfrenta por distribuir cocaína y marihuana en los Estados Unidos.
Si esto resulta cierto, y “El Hummer”, le pone el dedo a Eugenio, sin duda, el ex gobernador sería extraditado, pese a que en enero de 2018 un juez de distrito emitió una opinión no vinculatoria a su favor, para que no fuera enviado a los gringos.
La causa penal contra Eugenio en los Estados Unidos es la 2:14-cr-00178, por los delitos de lavado de dinero, operar un negocio de envío sin licencia y asociación delictuosa para cometer fraude bancario y su extradición fue aprobada desde el 2 de marzo de 2018, por el entonces Secretario de Relaciones Exteriores del gobierno de Peña Nieto, Luis Videgaray Caso.
