Agencias
Washington DC, Estados Unidos.-El narcotraficante Jesús Reynaldo Zambada García, «El Rey», negó en la corte federal de Brooklyn haber entregado siete millones de dólares para la campaña de 2006 del hoy Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Cuestionado por César de Castro, abogado defensor de Genaro García Luna, el capo del Cártel de Sinaloa dijo que él solo dio dinero a Regino, en referencia a Gabriel Regino, ex subsecretario de Seguridad Pública durante la Jefatura de Gobierno de López Obrador.
Ante el jurado, de Castro le inquirió por qué no recordaba que en 2013 había dicho a los fiscales estadounidense que había entregado siete millones de dólares para la campaña electoral del hoy Mandatario federal.
«El Rey» dijo que no, que él no había declarado eso, pero que sí había entregado dinero a Regino y que «era dinero para una campaña».
Ante la reticencia del capo a hablar del tema, de Castro tomó unos papeles para mostrar la declaración de 2013, sin embargo, la fiscal Saritha Komatireddy objetó la intención del litigante, el juez llamó a las partes y el defensor de García Luna ya no insistió en el tema.
Ayer, durante el primer día de su comparecencia, Zambada García aseguró que entregó tres millones de dólares a Regino debido a que tenía la expectativa de que se convirtiera en Secretario de Seguridad Pública de la Ciudad de México.
Hoy, de Castro, intentó vincular la entrega de dinero al ex funcionario capitalino con el Presidente López Obrador haciendo referencia a un testimonio que «El Rey» habría dado a la Fiscalía en 2013, cuando ya se había convertido en testigo cooperante.
Zambada García fue detenido en octubre de 2008 en la Ciudad de México y extraditado a Estados Unidos en abril de 2012.
En 2018 participó como testigo en el juicio de Joaquín «El Chapo» Guzmán y ahí, por primera vez públicamente, declaró que había pagado sobornos tanto a García Luna como a Regino.
Ayer, dijo que en 2008 policías capitalinos lo salvaron de que lo mataran los agentes de la Agencia Federal de Investigación (AFI) y sicarios de los Beltrán Leyva que iban infiltrados, durante la balacera que derivó en su captura en la Colonia Lindavista.