*Caso del periodista Armando González Treviño
* Los abogados Raúl y Roberto Gómez, encargados del caso dan detalles de la defensa del periodista.
Jorge Caleb / Alejandro Mares
De acuerdo a los abogados del difunto periodista Armando González Treviño, todo indica que se trató de una presunta “negligencia médica”, de los médicos y personal del IMSS.
A detalle, en entrevista, los abogados Roberto y Raúl Gómez, encargados del caso, desmenuzan los últimos avances de la investigación.
Habla Roberto Gómez:
“Tenemos exactamente la evidencia del accidente, cuando Armando González es impactado por el vehículo. La culpabilidad es manifiesta y la persona se fuga rumbo a la Avenida Longoria”.
Desgraciadamente no hay una imagen nítida para identificar, acaso parcialmente, al que conducía el vehículo, que ese si es el que trasladaron aquí a los patios, agregó.
“Sabemos que es un vehículo… por los recibos, que se encontraron, pero son recibos del estado de Coahuila, a nombre de una persona que tratan de identificar”.
El vehículo no tiene reporte de robo, pero hay que reconocer que los datos, son muy pobres… con pocos elementos. Es un vehículo de los que conocen como chocolates, americano, sin placas, pero no tenemos más datos.
Y luego interviene el abogado Raúl Gómez:
“Con el nuevo sistema penal acusatorio, no podemos, por ley, boletinar este vehículo, es una cuestión de ley.
“En la reunión que tuvimos con periodistas para darles a conocer la información que teníamos, hubo oposición en el sentido de que en las redes sociales publicáramos las características del vehículo”, recordó.
“Nos dijeron que no… y no quisimos causar polémica, pero yo les decía que si el culpable del accidente ya se había fugado, no tenía sentido seguir no tratando de identificarlo”.
Ese es el primer aspecto, pero después cuando se integra la carpeta de investigación en la Unidad de Investigación 3, nos damos cuenta que la muerte de Armando es por traumatismo craneoencefálico.
Explica Raúl Gómez:
“Cuando analizamos el expediente clínico, que por cierto, fueron bastante reacios de darlo a conocer, pero en los registros, la Policía Investigadora, hizo una entrevista con el doctor Arellano y él respondió que le falló el corazón.
“Pero cuando nosotros hacemos el análisis, cotejamos la información, nos dimos cuenta que a Armando no se le hizo ni un examen en su cabeza.
“Creo yo que dentro de los protocolos, que cuando llega una persona politraumatizada, prensada por varias horas, lo mínimo es hacerle un examen en su cabeza.
“Entonces, hay una gran discrepancia, entre lo que dice el Seguro por la muerte y lo que dice el legista”, sostuvo.
Raúl Gómez dijo que por eso mandaron el expediente clínico con los legistas y ellos siguieron firmes en que Armando murió por el traumatismo craneoencefálico y que no se le aplicó ni un examen neurológico.
“Mandamos pedir la comparecencia de los doctores que lo atendieron, van 2 y se acogieron al artículo 20, no declararon y queda uno pendiente”.
Los doctores son Francisco Alejandro Mancilla Hermosillo, que compareció el 1 de septiembre, que es el que lo operó. También esta el doctor Carlos Arellano Pérez, que es el anestesiólogo que compareció el 5 de septiembre y al doctor Gabriel Pérez Montiel, que estaba encargado de urgencias, intervino el abogado Roberto Gómez.
“Pero nosotros con toda esa información, tenemos 2 opciones, una mediación, para la reparación del daño a la viuda, o pedir al juez que judicialice”, reveló.
Para nosotros como abogados victimales, creemos tener datos suficientes para que los doctores sean vinculados a proceso por negligencia médica.
“Hay que ver si la viuda de Armando quiere mediar o nos vamos al judicialización, como se le dice hoy.
“Lo que nosotros sostenemos es que Armando no murió por el accidente, sino por la falta de atención, que no le dieron en el IMSS”.
María Esther, es mi cuñada, que es hermana de mi esposa, me dijo todo lo que pasó en el IMSS y te va sorprender lo que pasó, interviene el abogado Raúl Gómez:
Eduardo Cobos, quien hizo la autopsia, sostiene su diagnóstico de que murió por traumatismo craneoencefálico y que además no se le practicó ni un examen neurológico.
“Vamos a esperar que acuda el tercer médico y si no lo hace, vamos para adelante. Pero tenemos estas 2 vertientes: la mediación o judicializamos el caso”.