“Cuando veas las barbas de Rivas cortar; pon Borrega, las tuyas a remojar”, es el nuevo refrán que suena en Tamaulipas, por la más reciente información que se dio a conocer, de la vinculación a proceso del imputado Enrique Rivas, ex alcalde panista de Nuevo Laredo.
Un Juez de Control de Tamaulipas, vinculó a prisión preventiva al ex alcalde panista, quien ante la posibilidad de darse a la fuga, de escapar de su responsabilidad, de huir del país; le impuso como medida cautelar que deberá ingresar voluntariamente a la prisión.
Es la Fiscalía Especializada en el Combate a la Corrupción de Tamaulipas, la que le solicitó al Juez de Control, la vinculación a proceso del panista, acusándolo por los delitos de Ejercicio ilícito del Servicio Público y Uso Indebido de Atribuciones y Facultades.
La audiencia de vinculación se llevó a cabo el 12 de julio, donde el Ministerio Público, presentó datos y medios de prueba suficientes contra Rivas, para que este sea encarcelado ante la posibilidad de que al quedar en libertad pueda huir.
Rivas podría pasar más de 14 años en la cárcel por los delitos que ha sido imputado, de acuerdo al Código Penal Vigente en el Estado de Tamaulipas y todo derivado de una compraventa de un bien inmueble realizada para construcción de un Centro de Convenciones por 66 millones 702 mil 144 pesos.
Lo de Rivas es una peccata minuta, “un pelo de rana”, comparado con Mario Alberto López Hernández, “La Borrega Corrupta”, ex alcalde morenista de Matamoros, quien saqueo a este municipio durante 6 años, del 2018 al 2024.
También le apodaban “El 30”; por el 30 por ciento de moche que les exigía a los proveedores de la obra pública, este “angelito” oriundo del PRI rancio, se incrustó en la 4T y como presidente municipal manejó un enorme presupuesto de 11,000, 000,000.00 (Once Mil Millones de Pesos). Amasó una gigantesca fortuna.
La riqueza de “La Borrega Corrupta”, hoy en día es incalculable, posee ranchos, tanto en México como en Texas; vehículos de alta gama y hasta se dio el lujo de cerrar sus changarros que tenía en Matamoros. Este personaje se pitorrea de la justicia, goza de fuero constitucional, ya que es diputado federal por el partido Verde. Vamos a ver si se atreven aplicarle la ley, como hoy se la aplican a Rivas.
Esa misma Fiscalía Anticorrupción que acusó a Rivas, que como ya dijimos es un “un bebé de teta” comparado con “La Borrega Corrupta”; también le tiene al menos 3 carpetas de investigación en proceso al ex alcalde de Matamoros.
La justicia no tiene colores, eso lo vamos a ver en Tamaulipas, ya empezaron con un panista y el PAN dirá que es cacería de brujas y pudiera ser, si solo se manda a prisión a los adversarios políticos. Les recuerdo para que no se les olvide, que Mario López “La Borrega Corrupta”, no solo se enriqueció con dinero público, sino que hasta les mentó la madre a los morenistas de Matamoros y se sigue pitorreando, burlándose de la justicia desde el fuero constitucional.
El alcalde de Matamoros, Beto Granados, recientemente dijo que “La Borrega Corrupta” le dejó una deuda histórica de 180 millones de pesos:
“Al intenso trabajo que hemos venido realizando le denominamos el Renacimiento de Matamoros y le decimos Renacimiento, porque hace 9 meses encontramos una ciudad completamente en abandono, con más de 600 tuberías rotas de drenaje y con una deuda histórica municipal de 180 MDP; de los cuales 160 millones de pesos corresponden a la administración anterior”.
Beto Granados, remarcó:
“Es decir, la administración pasada (la de Mario López “La Borrega Corrupta”), es la que más ha endeudado a Matamoros”.
Para que usted querido y caro lector, se de una idea de los nefasto que fue el gobierno de Mario López “La Borrega Corrupta”, esa deuda que arrastra el Municipio de Matamoros, como ente moral y financiero, proviene desde el gobierno de Erick Silva Santos y los alcaldes que le prosiguieron como Alfonso Sánchez, Leticia Salazar y Chuchín de la Garza.
Estos 4 ex alcaldes juntos resultaron más decentes en el manejo financiero de la deuda, entre todos apenas dejaron 20 MDP; “La Borrega Corrupta” rompió record, él solito dejó 84 MDP de deuda a proveedores, muchos de esos pendientes, se trata de sus mismos testaferros, algunos hasta socios de facto o cómplices de la obra pública.
Fue tan sucia “La Borrega Corrupta”, que los derechos del agua que se deben pagar a CONAGUA tampoco los pagó, allí en ese rubro dejó 60 MDP de deuda y para decir, que su gobierno corrupto no tenía deuda pública, estas partidas no las registraba contablemente.
El nefasto gobierno de Mario López, fue tan cruel que también le dejó a Beto Granados 8 millones de deuda en medicamento; 3.5 MDP en combustible, lógico a su gasolinera consentida y no pagó el Impuesto Sobre la Renta (ISR), dejando muy mal parado al Municipio de Matamoros ante el SAT-SHCP por adeudos de 18 MDP.
Para concluir, la Fiscalía Anticorrupción de Tamaulipas, debe medir a todos con la misma vara, porque si no lo hace estaría incurriendo en un “fascismo judicial” y los gobiernos de la 4T y la nueva Reforma Judicial, actúan bajo una justicia humanista e imparcial, sin color, sin distingos: “Todos coludos o todos rabones”.