*Ese lugar es un cementerio de proyectos de PowerPoint del ex alcalde corrupto Mario López Hernández. Uno más de sus engaños y promesas incumplidas; ¡PURA LENGUA!, para burlarse de los matamorenses y saquear el presupuesto de Matamoros.
Alejandro Mares Berrones
En el 2018, Mario Alberto López Hernández, “La Borrega Corrupta”, llegó a la alcaldía de Matamoros, con una mano atrás y otra adelante e inmediatamente vio en la obra pública, la forma de saquear y de succionar el presupuesto municipal, el que por seis años manejó por una cantidad de 11,000,000,000.00.
Once mil millones de pesos, fue el presupuesto que “La Borrega Corrupta” manejó del 2018 al 2024; gracias al manejo irregular de esta cantidad de dinero, Mario López se convirtió en 6 años en el hombre más rico de Matamoros y del Valle de Texas; adquirió vehículos de lujo, de alta gama, compró propiedades, tanto a su nombre como de testaferros, abultó sus cuentas bancarias nacionales y extranjeras, incremento los ingresos fiscales de sus negocios, para aparentar bonanza ante el SAT.
Nadie sabe a ciencia cierta, a cuánto asciende la escandalosa riqueza que en la actualidad posee Mario Alberto López Hernández “La Borrega Corrupta”, quien además de saquear, de enriquecerse, se convirtió en “El Pinocho” y en el político del engaño para reelegirse.
Uno de esos engaños es “El Puente Invisible de la Mentira”, el Parque El Laguito, que se convirtió en un cementerio de presentaciones de Powerpoint de “La Borrega Corrupta”.
Esta es la historia de un alcalde corrupto, mitómano y cleptómano; que uso la mentira para engañar, con la única intención de perpetuarse en el poder y seguir enriqueciéndose:
En 2018, el colapso del puente en la avenida John F. Kennedy dejó a Matamoros sin una vía clave hacia la Cruz Roja, al antiguo Hospital General Alfredo Pumarejo y al colegio Don Bosco. Lo que quedó fue un enorme hueco en el parque El Laguito y otro más grande en la confianza ciudadana, la que descubrió realmente quien en realidad es Mario López “La Borrega Corrupta”.
Un año después, “La Borrega Corrupta”, apareció con soluciones: reconstrucción inmediata del puente y un megaproyecto para transformar el parque. Anunció ciclovía, gimnasio, clínica deportiva, alberca semiolímpica y, por si fuera poco, propuso rebautizar el parque como “Parque Nuevos Héroes”, porque al parecer, el único héroe que merecía aplausos era él.
Así de soberbio y ególatra se mostraba “La Borrega Corrupta”, quien prometía convertir ese lugar en un paraíso para las familias matamorenses, pero sus verdadera intención fue el engaño y la mentira para lograr su reelección.
Prometía con tanta facilidad que uno pensaría que lo decía en serio; aunque con el tiempo, más que un plan de gobierno, fue una burla al pueblo que, ingenuamente, se atrevió a confiar en él, en ese político corrupto y mentiroso.
Hoy, seis años después, no hay puente, ni ciclovía, ni gimnasio, ni alberca, ni clínica deportiva. Solo quedan el polvo y el abandono. Mientras tanto, vecinos y estudiantes siguen buscando cómo cruzar el caos como si fuera parte del entrenamiento olímpico.
Lo que si hay, pero para Mario López, es más riqueza, caballos finos, más vehículos de lujo, más propiedades, más ranchos, como el que tiene en San Benito Texas, entre otros.
Lo único que logró construirse Mario López con firmeza fue el desencanto de un pueblo que le dio la confianza y los traicionó. El Parque El Laguito pasó de ser “el pulmón verde” prometido, a convertirse en un cementerio de proyectos. Y mientras la ciudad espera, es probable que “La Borrega Corrupta” ya esté construyendo su próxima gran idea… en PowerPoint.