“El ocaso” de Jesús Mendoza Reyes

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*Conflicto en puerta

*La abogada Susana Prieto, anunció a mediados de año que Mendoza Reyes será el primer dirigente obrero destituido…por explotador, fantoche y abusar de la clase obrera.

Alejandro Mares Berrones

En medio de las negociaciones contractuales, un “fantasma recorre la ciudad y viene por el alma del dirigente explotador de obreros”, Jesús Mendoza Reyes, dirigente del Sindicato de Trabajadores de Plantas Maquiladoras y Ensambladoras de Matamoros (SITPMEM), mejor conocido como “El Gallo Viejo”, porque solo se le sube a las gallinas para que lo paseen.
Es la licenciada Susana Prieto Tarrazas que en su última visita a esta ciudad, a mediados del año, advirtió que debido a los bajos salarios y explotación de los obreros en las maquiladoras de Mendoza Reyes, “no descansaría hasta lograr la destitución de Jesús Mendoza”, además de que la mandó amenazar de muerte.
La advertencia la hizo en público en la Plaza Principal, que ha sido el centro de las protestas del movimiento 20-32.
Ese Jesús Mendoza Reyes, que dio “un golpe de estado” a su hermano Leocadio que es el verdadero fundador del sindicato en la época de los 90.
A ese que le gusta “vestir elegante”, pero los colores “chocantes lo hacen ver como el Guasón de las películas de Batman”.
Aquel que le gusta acompañarse de jovencitas obreras que “lo procuran como un sultán” y que vive en Brownsville, Texas.
Y ya a principios de año, Susana Prieto advirtió sobre las “triquiñuelas de este viejo líder”, que se promociona en las redes sociales, a través de “sus jilguerillos oficiales” como “un líder que no se sabe rajar”, luego de un prolongado liderazgo charro.
El 19 de febrero de este año, en compañía de un grupo de trabajadores de la empresa Robert show, y en medio del conflicto que se generó por el movimiento 20-32, la abogada Susana se reunió con el presidente al filo de mediodía, en presidencia municipal, para exponer la situación de los trabajadores.
A su salida, Prieto Terrazas, explicó la situación que sucedía en la empresa (Robert show) “se han cerrado los baños, la cafetería, pero están allí y deben definir si los despiden o no, pero que estén secuestrados, eso no se vale”, dijo.
“Esta empresa es de él también, de Mendoza Reyes, y esta como juez y parte, porque aparece como accionista, pero solo consiguió un aumento del 8 por ciento al sueldo”, anunció entonces.
Prieto Terrazas había encabezado ese día una manifestación en la Plaza Principal, con unos 300 trabajadores de la empresa y denunció la situación ante el presidente municipal Mario López Hernández.
Pero a mediados del año pasado, Mendoza Reyes presumía de los logros laborales.
“A diferencia de los buenos resultados en el sector laboral, en política, sus principales actores, con sus actitudes, han denigrado a la política y a las instituciones”, afirmó el dirigente SITPMEM, Jesús Mendoza Reyes.
En entrevista, el dirigente obrero, al analizar la situación laboral y los comicios del año pasado, desde sus oficinas en la calle 4 Morelos y Guerrero, aseguró que con todas “las sandeces” que se dicen en los medios, provocan que los mexicanos nos sintamos “decepcionados y resquebrajados”, se quejaba en aquel entonces.

“Conflictos de familia”

A mediados del 2 mil 13, en las oficinas de la entonces Visitaduría Regional de la Comisión de los Derechos Humanos del Estado de Tamaulipas (Codhet) en la calle González y 12, un hombre de tez morena, que lucía muy agotado, delgado y encorvado, esperaba su turno al lado de una mujer.
Hizo contacto visual con el reportero y “soltó a boca de jarró”:
— ¿Cómo esta señor periodista, ya no se acuerda de mí, usted es reportero, verdad?
—- La verdad no mi amigo, discúlpeme no me acuerdo… y sí, soy reportero —
— “Soy yo, el fundador del SITPMEM, Leocadio Mendoza”— respondió con su aguardentosa voz que lo caracterizó en su liderazgo obrero, pero con una presencia que no era la de él en sus mejores tiempos.
— Don Leocadio, qué anda haciendo aquí—se le preguntó.
— “Pues batallando. Me dio azúcar, presión alta y necesito medicamentos especiales. En el sindicato que yo fundé en los 90 (SITPMEM) con muchos sacrificios y conflictos, no me los quieren pagar ni aumentar mi jubilación para comprarlos. Me estan matando, amigo”.
Y se soltó: “Mi hermano (Jesús Mendoza Reyes) que me despojó del sindicato me ha tratado muy mal, me retiene la jubilación, me traen a puras vueltas y yo no estoy en condiciones de andar para todos lados.

“Por eso vengo, porque se estan violando mis derechos. Yo ya no aguanto asi y solo estoy pidiendo lo que me corresponde”.
Le llegó su turno y la secretaria lo invitó a pasar a la oficina del visitador, en aquel entonces Javier Saldaña Badillo. A paso lento y apoyándose en la mujer que lo acompañaba, se dirigió a la oficina.
—“Lo veo después amigo”—se despidió.
Luego, en pleno conflicto laboral que se generó a principios de enero, por el movimiento 20-32, volvió a resurgir.
El miércoles 23 de este año, cientos de trabajadores se presentaron a las instalaciones del SITPMEM Para solicitar un mayor aumento de salario, mejorar las condiciones laborales y un bono, ante la usencia de su líder, cientos de trabajadores de las empresas, Tridomex y Chumex, declararon un paro de labores.
Con consignas de aumento al salario y mejores condiciones de trabajo, los empleados de ambas empresas solicitaron el aumento del 100 por ciento a su salario y no el 20, además de un bono por 32 mil pesos que no se dio el año pasado ni este.

Allí, los obreros solicitaron la presencia del dirigente del STPMEM, Jesús Mendoza Reyes, quien nunca llegó a las instalaciones del sindicato, ubicado en la calle Cuarta entre Guerrero y Morelos, que desde temprano, fue cerrado y un grupo de sujetos resguardaban la entrada.
Al filo de las 3 de la tarde el exdirigente del SITPMEM, Leocadio Mendoza Reyes, se presentó en las instalaciones del sindicato que fundó en los noventa, para darles el apoyo a los trabajadores.
Manifestó que reclamará su liderazgo al frente del sindicato y dará un verdadero apoyo a los trabajadores.
Aseguró que ganó un amparo de la justicia federal que lo acredita como el verdadero dirigente del SITPMEM y entre aplausos, se retiró del lugar.
Luego el martes 30, llegó como a la 1 de la tarde, a la Plaza Principal, sin más que una cobija que puso justo al píe de la astabandera y se declaró en huelga de hambre, para solicitar la intervención del Gobierno federal en el conflicto obrero.
Era Leocadio Mendoza Reyes, el exdirigente y fundador del SITPMEM, Leocadio Mendoza Reyes.
Ante la sorpresa de algunos obreros que empezaban a reunirse allí en la plaza, a grito abierto, Mendoza Reyes, solicitó a al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, que acudiera a Matamoros, para ver el conflicto laboral.
Ya con la voz entrecortada y a punto del llanto Leocadio Mendoza exclamó:
“Don Agapito González Cavazos, le pedimos que nos ilumine para poder salir de esta crisis que tenemos en Matamoros, nos hace mucha falta y nos hace falta que nos ilumine.
“Necesitamos un salario justo, digno, competitivo y no miserable, con prestaciones justas.
“Con forme a la ley hay que cambiar a los líderes, que ya son obsoletos e ineptos para lograr acuerdos, propuso.
“Les recuerdo compañeros que las empresas no tienen tierra, no tienen patria, las fabricas son de todo el mundo y se van a donde los traten bien”, arengó Mendoza Reyes.
“Solo les recuerdo que yo soy el verdadero líder y fundador del SITPMEM, del que me despojó un rata, Jesús Mendoza Reyes y mis padres se han de estar avergonzando en el cielo porque ya murieron”, sentenció.
Pero dado su estado de salud, para el miércoles 30 también como al mediodía, elementos de Protección Civil acudieron hasta la plaza para asistir a Mendoza Reyes que resultó con la presión alta y el azúcar, por su diabetes, pero insistió en quedarse, bajo la ligera lluvia y el frío.

La “cargada azul”

A principios de este año, la “cargada azul” del gobierno represor de Francisco Javier García Cabeza de Vaca, el recién designado secretario del Trabajo del Gobierno del estado, Miguel Villarreal Ongay, anunció que ya se había iniciado el proceso de revisión de contratos con las primeras 60 empresas de la ciudad.
Dijo que sobre la mesa de negociaciones esta la petición de un aumento del 30 por ciento y la reducción de 42 horas a 40 horas laborables.
  A prácticamente un año de que se llegará a la celebración de paros en un gran número de empresas manufactureras y al estallamiento de algunas huelgas en ese mismo municipio, (por el movimiento 20-32) el funcionario estatal indicó que ahora, se trabajará para evitar al máximo ese tipo de movimientos.
Luego se vino “la cargada azul” y fue el propio secretario de Gobierno, César Verastegui Ostos, quien advirtió que debe prevalecer el estado de derecho y paz laboral que es el interés del gobernador Francisco García Cabeza de Vaca.
Y es que empresarios, gobierno y sindicatos se reunieron en una mesa de trabajo para ventilar el tema de las negociaciones entre sindicatos y empresas.
En esta semana el secretario de Desarrollo Económico, Carlos García González (Chito) a manera de amenaza, recordó que con el cambio de las leyes laborales, los sindicatos podran perder su registro si sus obreros participan en paros laborales.
Confió en que sindicatos y empresas alcancen los acuerdos necesarios y que respeten los lineamientos de la Comisión Nacional de Salarios.
A la campaña mediática se unieron la Confederación Patronal Mexicana (Coparmex) que en voz de su presidente aquí en Matamoros, Carlos Alberto González Lima, solicitó a los 3 órdenes de gobierno (federal, estatal y municipal) que no se permitan los conflictos laborales como los que suscitaron a principios de año.
Y dijo:
“Obviamente lo qué pasó en enero dejó mucha incertidumbre, nosotros siempre hemos puntualizado que se tardó mucho el gobierno en actuar, por ello ahora hemos pedido que se cumpla con el compromiso en caso de ser necesario”.