ALEJANDRO MARES BERRONES
“No puedes joder al pueblo que te llevó al poder”, le responden a Carlos García
“Hay se los encargo”, dijo Raúl Quintanilla, coordinador estatal de ONAPPAFA y agregó: “el día que ande buscando el voto y toque a su puerta…MANDENLO A LA CHINGADA…o sea, al rancho del Peje”.
Las declaraciones que por separado hiciera la diputada Yahleel Abdalá Carmona y el diputado Carlos García González, en el sentido de que están de acuerdo con el decomiso de autos ilegales, de los llamados “chocolates”, tuvieron respuesta en Matamoros.
La primera legisladora federal priista y secretaria de Asuntos Frontera Norte de la Cámara de Diputados; y el segundo, legislador local panista y presidente de la Junta de Coordinación Política del Gobierno del Estado, ambas declaraciones a favor del decomiso de autos “chocolates”, puso en alerta a las organizaciones como la ONAPPAFA que por varios años y meses luchan para que la nacionalización de estos vehículos se vuelva una realidad social.
Yahleel Abdalá Carmona, en su reciente visita a Matamoros, dijo que es falso que exista algún programa de nacionalización de autos chocolates que ellos estén promoviendo en la Cámara de Diputados, y aseguró:
“Lo que queremos es una regularización para los más de 800 mil vehículos que están ya en territorio nacional de manera ilegal en la frontera, lo demás es completamente falso lo que una organización (ONAPPAFA) está promoviendo de un programa de nacionalización a bajo costo y que para eso tengan que empadronarse con ellos”.
La diputada fue contundente:
“No existe tal programa, lo que nosotros estamos viendo es la manera de regularizar los autos ilegales y en el cual solamente entrarían los de la frontera y no los más de 4 millones de vehículos ilegales que hay en el interior del país y ninguna autoridad federal está en algún convenio con estas organizaciones y este programa sería solamente para regularizar no para nacionalizar y solamente para los carros fronterizos así que lo que ellos dicen es completamente falso”.
Fue el coordinador regional, de la Organización Nacional de Protección al Patrimonio Familiar (ONAPPAFA), José Isaac Torres Villela, el que le respondió a la diputada.
“Existe el programa IDENTIFI-K-T, este es un acuerdo que existe con autoridades federales, para poder transitar por las carreteras del país, a pesar de ser ilegales, pero debidamente identificados en nuestra base de datos”.
José Isaac Torres Villela, dijo públicamente que el ingresar a este programa que ellos tienen, no garantiza que en determinado momento haya alguna autoridad como Hacienda, a través del SAT que pueda hacer un decomiso de la unidad motriz.
QUE SE PONGA A TRABAJAR
Por su parte Raúl Quintanilla, coordinador estatal de ONAPAFA, le contestó al diputado panista, Carlos García González:
“Él dice que está a favor del decomiso de autos, entonces nosotros le preguntamos a Carlos García, ¿cuántos años tiene?, digo yo lo conozco desde que estaba chiquito, desde que le cambiaban los pañales y yo no me acuerdo, hasta ahorita, fuera del dinero que tiene, que ha comprado todas sus posiciones políticas, porque todas han sido de chiripa, yo no me acuerdo que haya traído un beneficio para Matamoros”.
Y se le atiza a Quintanilla:
–¿Es verdad, este diputado de marras, no ha hecho nada por Matamoros?
A Quintanilla se le suelta la lengua:
“Nos chingo con el IVA, él fue uno de los que votó a favor de la homologación del IVA, de que nos aumentaran el IVA”.
Se le “estarea”:
-Él dice que eso no es cierto, ¿Qué son mentiras las tuyas?
Quintanilla, reflexiona y agrega:
“Yo creo que hay algún mal, no sé si sea brujería o sean víctimas del café que toman, porque a nuestros diputados les está dando amnesia, tanto a Carlos García González como a Yahleel Abdalá Carmona”.
De su ronco pecho, exclama:
“Yo no veo una Cámara de Diputados, más que de dos formas, los que duermen y los amnésicos, al final es lo mismo”…
Se le volvió a preguntar a Quintanilla:
-Es grave que el Presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado, no se ponga a favor del pueblo, está a favor del decomiso de autos chocolates, cree que los obreros, albañiles, plomeros, agricultores… que todos somos delincuentes, ¿qué te parece?
En tono de guasa, responde:
“Estamos haciendo una coperacha para ver si le podemos contrarrestar los efectos de la pastilla que se tomó que le hizo mal efecto y ojala que se ponga a trabajar Carlitos, porque ya es tiempo, después de ser dos veces diputado federal, ya es tiempo que nos digas para que carajos lo nombraron diputado local plurinominal”.
-Carlos García quiere ser Presidente Municipal, ¿Qué te parece?
-“Ojalá, lo mande el PAN para acá, ya que quiere ser presidente municipal, ojalá y nos lo mande Dios para acá, para que reciba el repudio de un pueblo que hasta ahorita no tiene nada que agradecerle”.
Y ya entrados en la entrevista, la cual se dio por casualidad el pasado viernes en la presidencia municipal de Matamoros, le soltamos otra a nuestro entrevistado:
-Con esta clase de diputados, ¿está difícil la nacionalizada?
-“Yo no te puedo decir, que nos van a dar una nacionalizada, porque no depende de mí, lo que si te puedo asegurar y comprometerme con la gente, no solamente de Matamoros, sino de todo el país, que me están pidiendo que los apoyemos para nacionalizar sus carros y que nos vamos a morir en el intento, nosotros no vamos a cesar y vamos a seguir tocando puertas, porque esto se tiene que hacer”…
Sentenció:
“Te puedo decir, que ni Yahleel Abdalá Carmona, ni Carlos García son autónomos y la mayoría de los diputados están conmigo”.
Se le enciende la “marcha” a nuestro entrevistado:
-Estos diputados dicen que los autos chocolates están en la ilegalidad, ¿Qué opinas?
-“Yo te pregunto, por qué están fuera de la legalidad, si nosotros queremos pagar impuestos, lo que pasa es que yo no te puedo pagar impuestos por un carro 2000, cuando el gobierno quiere cobrar por un carro 2015 o 2016, como carajos va a ser posible que yo compro un carro con 2 mil dólares y me quieras cobrar 3 mil de impuestos, es ilógico eso”…
Reflexiona:
“Viendo la situación, el culpable no es la gente, como Yahleel Abdalá Carmona y Carlos García lo han dicho, ellos creen que todos somos delincuentes, la gente quiere nacionalizar su carro, estamos hartos de que nos extorsionen en la carretera y en las ciudades”.
Y ya encendido el motor, se le vuelve a preguntar a Raúl Quintanilla:
-Carlos García dijo que en el estado ya se van a implementar retenes para el decomiso de autos chocolates, ¿Cómo la vez?
-“Carlos García dijo algo peor, que había un clamor del pueblo, por la cuestión de inseguridad, el único que causa inseguridad es él, con su forma tan estúpida de pensar, no puedes joder al pueblo que te llevó al poder”…
Y le pide al diputado de marras:
“Simple y sencillamente que retire lo dicho de que está a favor del decomiso de autos, porque él no solamente se da el lujo de traer una camioneta que cuesta un millón de pesos, trae tres o cuatro”…
A Quintanilla, “le encendemos las luces” con otra pregunta:
-Y es que este diputado de marras le vale, pues no vive aquí en Matamoros, él vive en Texas, ¿Crees que le importa que se nacionalicen los carros de los obreros, de los albañiles, de la gente del pueblo?
-“Últimamente no nos importa donde vivan, sino que cumplan el compromiso que hicieron que fue el de legislar a favor del pueblo, para los matamorenses en el caso de él y hasta ahorita, vuelvo a repetírtelo, no le debemos un favor, al contrario él a través de su agencia aduanal nacionalizó más de mil 500 vehículos en tiempos pasados y ahora como está de diputado se opone a la nacionalizada y hasta está a favor de decomisar las unidades, que podemos esperar de este diputado que voto a favor del aumento al IVA en la frontera”.
Y retador concluye:
“Hay les encargo a Carlos García, el día que ande buscando el voto y toque a su puerta…MANDENLO A LA CHINGADA…o sea, al rancho de El Peje”.
Así concluyó la entrevista, con Raúl Quintanilla, hay que ver que dice Carlos García, ya ve Usted querido y caro lector, este diputado de marras, quiere ser alcalde por que dice “que ya le toca”.
Nos vemos en la próxima y recuerde: ¡El lenguaje como legítima defensa!