En el estacionamiento de una tienda de conveniencia fue asesinado un hombre a disparos, supuestamente, por una mujer, que según testigos, se trasladó en un auto color negro
En el estacionamiento de una tienda de conveniencia, el checador de la ruta de peseras Zenith fue asesinado a balazos por una supuesta mujer hasta el momento no identificada, quien se desplazaba abordo de un vehículo color negro.
El homicidio se registró a plena luz del y a la hora de que muchas maquiladoras le estaban dando salida a los empleados.
Los hechos se reportaron a las 17:10 horas de ayer en un negocio ubicado en la carretera a Río Bravo, a la altura de la brecha E-99, en el Parque Industrial Reynosa- Norte.
El cuerpo de un hombre de aproximadamente 40 años de edad, quien vestía pantalón de mezclilla y playera color azul con el logotipo de la ruta Zenith, residente de la colonia Paseo de las Flores, quedó tendido boca arriba.
Testigos del crimen reportaron a los números de emergencias refiriendo que el checador de las peseras había sido baleado por una mujer quien escapó a bordo de un vehículo Ford tipo Focus, color negro, con rumbo a Río Bravo.
Al lugar se presentaron elementos de la Policía Estatal quienes confirmaron el homicidio y solicitaron la presencia de las autoridades ministeriales.
Los policías estatales acordonaron el lugar para evitar que la escena del crimen se contaminara debido a que era la hora de entrada y salida de varias maquiladoras del sector.
Minutos más tarde al sitio se presentaron peritos criminalistas de la Unidad de Servicios Periciales de la Fiscalía General de Justicia del Estado de Tamaulipas (FGJ) y elementos de la Policía Investigadora para realizar las indagatorias del caso.
Las autoridades ministeriales encontraron tres casquillos percutidos de calibre 45mm, a los alrededores del cuerpo de la víctima, mismo que presentaba varias heridas en cráneo, mandíbula y tórax.
Los elementos de la Policía Investigadora se entrevistaron con algunos testigos de los hechos y con familiares del occiso quienes acudieron al lugar para identificarlo.
Las cámaras de C-4 del sitio estaban destruidas, no habían grabado nada y las de la tienda de conveniencia eran investigadas para ver si estaban en funcionamiento.
Una vez concluyendo con las diligencias, los peritos criminalistas hicieron el levantamiento del cuerpo y lo trasladaron a la morgue donde le realizaran la necropsia de ley y otros estudios forenses.
