…trato especial y de peso tosco a su familia
Fuente Revista Vertical/Manuel Quevedo
Jorge Espino Ascanio es Auditor Superior del Estado, es el responsable de la oficina desde donde se revisan las cuentas públicas de las dependencias estatales y los ayuntamientos de Tamaulipas.
Pero lejos de cumplir con el trabajo por el que los tamaulipecos le pagan muchos miles de pesos al año, se dedica a sacarle provecho a su posición, sin que el Congreso del Estado, convertido en fábrica de candidatos, le haya aplicado la ley despidiéndolo… nadie lo toca, nadie lo audita, la ley en esos casos, es letra muerta.
Desde Noviembre de 2020, se dio a conocer una de las irregularidades por las que ya debería haber sido destituido del cargo que le confiriera el congreso del Estado por 7 años, pero a la fecha su situación sigue intacta, y él, inamovible, pues para los círculos de poder que lo llevaron hasta ahí, el asunto es peccata minuta.
A pesar de haber sido exhibidos los contratos de Jesica Mabel y Alejandra Melissa Calzado Saldívar, hijas de la mujer con la que vive desde hace cinco años, empleadas de la Auditoria Superior del Estado con sendos salarios de 15 y 30 mil pesos mensuales, ningún diputado en el congreso local ha llevado el asunto a tribuna, ninguno de los que están al servicio del gobernador, ninguno de izquierda, mucho menos Joaquin Hernández Correa, quien impulsó el nombramiento de Espino como titular de la ASE.
Alejandra Melissa fue contratada en el primer trimestre de 2017, entró de base en el puesto de auxiliar administrativo en la Dirección de Contraloría Interna, pero tan solo seis meses después, la ascendieron a la oficina del Auditor, con un sueldo de 14,602 pesos mensuales que cobra hasta la fecha.
Para el 6 de enero de 2020, Jorge Espino Ascanio en acuerdo con el director general de Administración y Finanzas, Pedro Sosa Rodríguez y el subdirector de Recursos Humanos, Carlos Alberto Hernández Vicencio, se trajo de la secretaría del trabajo a la hermana, Jessica Mabel Calzado Saldívar, a la que contrataron con un salario de más de 30 mil pesos mensuales.
La Ley de Responsabilidad de los Servidores Públicos de Tamaulipas, en el artículo 47 fracción XVII, ordena que los funcionarios deben “abstenerse de intervenir o participar indebidamente en la selección, nombramiento, designación, contratación, promoción, suspensión, remoción, cese o sanción de cualquier servidor público, cuando tenga interés personal, familiar o de negocios en el caso, o pueda derivar alguna ventaja o beneficio para él o para las personas a las que se refiere la fracción XIII”.
Pero en Tamaulipas la ley no aplica para los personajes cercanos al poder gubernamental, solamente para los contrincantes políticos y para los pobres.
Jorge Espino Ascanio se ha colocado como uno de los personajes de mayor poder e influencia en la política tamaulipeca, con el poder de conseguir candidaturas en partidos afines a Acción Nacional, así como convenios publicitarios de más de 100 mil pesos mensuales en diversos municipios del Estado, para su pareja María Guadalupe Saldívar Villasana, quien fue esposa del periodista desaparecido en 2011, Victor Manuel Calzado, quien administra la agencia de noticias fundada por el comunicador.
