*Abel Morón Guzmán, se beneficia con contrato…
*La Cámara Nacional de Comercio, utiliza su posición como miembro del Consejo de Administración de la Junta de Aguas y Drenaje de Matamoros, para beneficiar a su presidente, para que este preste un servicio de toma de exámenes de laboratorio a 50 personas por mes como mínimo con un costo por cada uno de mil 800 pesos más impuestos.
Alejandro Mares Berrones
La Junta de Aguas y Drenaje, tiene una historia muy bonita, pues la crearon hombres y mujeres con principios solidos de honestidad, con la ayuda de donaciones del pueblo de Matamoros, sin embargo, al paso de los años y hoy en la actualidad sufre de una profunda corrupción.
Al grado que organismos como la Cámara Nacional de Comercio de Matamoros -CANACO-, ha echado raíces profundas y en vez de vigilar la buena administración de esta paramunicipal, se ha convertido en cómplice.
Pese a que la CANACO ocupa un asiento en el Consejo de Administración de la JAD, esta no cumple con los principios de honestidad y ha caído en la vulgar y corriente acción del nepotismo político.
Gracias a la posición que ocupa la CANACO en el Consejo de Administración de la JAD, esta ha beneficiado a su presidente Abel Morón Guzmán con un contrato de prestación de servicios de exámenes de laboratorio, por lo menos de 90 mil pesos mensuales.
Abel Morón Guzmán, es suegro del asesor jurídico de la Cámara de Comercio, el abogado Cristian Pérez Cosio, quien además tiene a otros familiares y amigos en la nómina de la paramunicipal.
Se supone, que las organizaciones (representantes) que integran el Consejo de Administración de la JAD, son puestos a títulos honoríficos; en el caso de la CANACO, está ha roto con ese principio que por decreto está establecido y por el que luchó en aquellos años Don Carlos Almanza, padre de Jorge, Silvia y de Julio, quienes manejan en realidad la CANACO.
Si Don Carlos viviera, qué pensaría de sus hijos, que han sucumbido a la ambición del maldito dinero; por ejemplo, Jorge Almanza, él jura y perjura que nada tiene que ver con la JAD, pero las altas y las bajas del personal de la paramunicipal primero pasan por él, hasta parece que tiene una empresa outsorcing, pues en la propia nómina de la JAD aparecen las secretarias de sus farmacias.
El caso es que Abel Morón Guzmán, aparece registrado en el padrón de Proveedores de la JAD bajo el número CON-422-2018 y desde la llegada de Guillermo Lash de la Fuente como gerente general de la Junta de Aguas, este se ha visto favorecido con un contrato de prestación de servicios de exámenes de laboratorio, por los cuales cobra como mínimo 90 mil mensuales.
Así sin ningún recato, ni moralidad, como si no existieran otros laboratorios de análisis clínicos en la ciudad, la JAD escogió el laboratorio de Morón Guzmán, ubicado en calle Primera número 1107 entre González y Morelos, en lo que se conoce como Centro Médico CEMQ, uno de los más caros servicios médicos de Matamoros.
En el clausulado del contrato celebrado entre la JAD que representa el gerente general Guillermo Lash de la Fuente y “el prestador de servicios”, en este caso Abel Morón Guzmán, se establece:
Que Morón Guzmán realizará exámenes de laboratorio a 50 trabajadores de la JAD mensualmente, que consisten en los siguientes paquetes de información completa de salud:
Paquete Mujer: Química sanguínea completa, Biometría Hemática completa, Examen General de Orina, Reacciones Febriles y antígeno Ca 15-3.
Paquete Hombre: Química sanguínea completa, Biometría Hemática completa, Examen General de Orina, Reacciones Febriles y antígeno prostático específico.
Por cada uno de esos paquetes, la Junta de Aguas y Drenaje de Matamoros, pagó a Abel Morón Guzmán, la cantidad de mil 800 pesos más impuestos por cada paquete de exámenes de laboratorio solicitado.
“La cantidad pactada deberá ser pagada a Abel Morón Guzmán mensualmente dentro de los 10 días hábiles siguientes, previa presentación de la factura correspondiente”, dice el contrato.
Supuestamente la JAD, previo al pago por los servicios de Morón Guzmán, comprueba en base a un listado de las personas que fueron a la toma de exámenes, situación que este medio hizo un sondeo con personal de la JAD, principalmente el sindicalizado y manifestaron en su gran mayoría que no les han practicado ningún tipo de examen, menos en el CEMQ.
Por lo anterior, el Presidente de la CANACO, Abel Morón Guzmán pudiera estar cobrando sin realmente presentar el servicio, que dice presta para los empleados de la Junta de Aguas y Drenaje de Matamoros.
Si no es así entonces tanto él como el gerente de la JAD, deberían mostrar el listado de los 500 empleados que supuestamente ha atendido en lo que va de este año 2019, de lo contrario ambos están saqueando los dineros que caen a las arcas de la JAD y que son del pueblo de Matamoros.
Queda claro, que al médico Abel Morón Guzmán, se le beneficia con un contrato de prestación de servicios de exámenes de laboratorio por 90 mil pesos mensuales como mínimo, solo por el hecho de ser el Presidente de la Cámara de Comercio, violando con ello el artículo 4 del Reglamento de Reestructuración Administrativa de la JAD, publicado en el Decreto 53 del Periódico Oficial número 98, de fecha 6 de diciembre de 1972, que dice:
“Los integrantes de la Junta de Aguas y Drenaje de la Ciudad de Matamoros, desempeñarán sus respectivos cargos a título honorífico” y la CANACO es integrante del Consejo de Administración de la JAD y Abel Morón Guzmán es su presidente, por lo que no es nada decente que se beneficie con una supuesta “prestación de servicios”.
Si Don Carlos Almanza viviera, se quitaría el cinto y los agarraría a todos a cinturonazos, le daría vergüenza en lo que han convertido a la CANACO.