Ante la falta de atención medica en hospitales, la gente acude al Dióxido de Cloro
*El caso de José del Carmen Castro Romo y sus hermanas, mostraron la efectividad de este producto y la negación de atención medica en instituciones como la clínica San Charbel
Alejandro Mares Berrones
A pesar de que las instituciones de salud, del sector privado y de gobierno, presumen la recuperación de pacientes de Covid, la realidad es que no están atendiendo a las personas que acuden con esta enfermedad.
El caso de José del Carmen Castro Romo y sus hermanas, muestra la deficiencia de los hospitales y de instituciones privadas como la clínica San Charbel.
“Todo empezó con la enfermedad de mi madre Esperanza Romo Almaguer, ella murió desgraciadamente, el 9 de julio”, aseguró José del Carmen Castro Romo, abogado de profesión y dedicado al negocio de un Yonque.
“Después nos hicimos fuertes para sacarla adelante, pero toda la familia ya traía los síntomas. Yo comencé a empeorar, sentía que no podía respirar, sentía que se coagulaba la sangre en el cerebro, sentía como una bola, la parte de la nuca se me inflamó”.
“Fue algo muy difícil que viví, luego mis hermanas también, lo que yo quiero decirles es que estuve hablando a diferentes instituciones, pero no podían atenderme.
Castro Romo narró que fue a la San Charbel, el día 11 de julio, porque ya se sentía muy mal, que se moría.
“No podía ya ni respirar, allí me pasaron a urgencias y me dijeron que traía todos los síntomas del Covid, pero me dijeron que allí no podían atenderme”.
“A pesar de todo y de la disposición para pagarles, pero no quisieron, una doctora sale y me pide que me retire, porque no estaban recibiendo personas con Covid, prácticamente nos corrieron a mi y a mi padre.
“Me fui a la casa, y me resigne, me dije que iba a morir igual que mi madre en casa, ella también murió en la casa”, recuerda José del Carmen.
“Yo digo que fue un milagro, porque esa persona me salvó, era una amiga que nos dejó un líquido, Solución de Dióxido de Cloro y desde la primera toma, me sentí diferente, empecé a respirar”.
“Me sentí que me liberaba de algo, lo hice 3 días seguidos y ahora ya estoy al cien. Se que hay mucha resistencia a que se use, pero en mí y en mis hermanas resultó.
“En mi caso, pues estoy decepcionado y creo que es falta de ética por no atender a las personas, tanto en los hospitales públicos, como en esta clínica San Charbel.
“También ocurre en los hospitales, en el Pumarejo me dijeron que no podían atender a mi madre, ni a mi después.
Las autoridades de los 3 órdenes de gobierno, no pusieron atención de manera preventiva.
“Yo ya esperaba la muerte, verdad, pero con este producto, sentí el cambio total de mi cuerpo y gracias a las personas que me lo trajeron y gracias a Dios, pude salir adelante.
“Mis dos hermanas también estaban graves, pero todos tomamos esta solución de 8 mililitros en medio litro de agua para tomarse en 2 horas, poco a poco hay que tomarlo, no de golpe”.
“El cambio fue grande, ya pude respirar y lo mismo pasó con mis hermanas, pero los tres lo superamos al mismo tiempo en verdad este producto resultó en nosotros”, finalizó.