Por Guadalupe E. González
CARLOS Y SU MADRE, LE FALLAN A REYNOSA
X.- “EL CLARO ABANDONO DEL PUEBLO, ES LA PRUEBA IRREFUTABLE”
X.- “FAMILIAS SUMIDAS ENTRE INMUNDICIA Y PROMISCUIDAD SOCIAL”
HABER rendido Carlos Peña Ortiz, un Ier. informe de Gobierno, en donde predominaron “los números Alegres, las frases célebres”, pero sobre todo la hipocresía, el engaño y la traición, en agravió a las sufridas familias de Reynosa, eso no convence en nada a un pueblo que, en lugar de verse favorecido con real obra pública, está siendo vilmente pisoteado y aporreado por un “joven” que, “como títere de carpa”, es manejado por su madre Maki Ortiz Domínguez, a cuya mujer, “no le bastaron 5 años de gobernar Reynosa”, para (saciar) sus más apremiantes necesidades económicas, (diríamos millonarias), porque ella, a través de su vástago, “sigue teniendo en sus manos”, no solo el poder político, sino también “el dinero del pueblo de Reynosa, a su entera disposición”. Y consecuentemente, “Maki es hoy el poder tras el trono”.
REYNOSA presenta un escenario de claro agravio, porque la ciudad, lamentablemente, “se encuentra entre la inmundicia y la promiscuidad social”, esto lo decimos porque, en el primer cuadro, lado norte de la zona centro, por calle Iturbide, así como en otros muchos sectores de la zona urbana, sub urbana y rural, entre cuyas colonias podemos citar “La arboleadas”, “Granjas económicas”, “Almaguer”, “Fraccionamiento Reynosa” y en la mayor parte de las más de 500 colonias que conforman Reynosa “la ciudad está destrozada, por las aguas negras nauseabundas que corren a cielo abierto por las calles, como consecuencia del claro estado terminal de la tubería de drenaje, cuyo problema (Maki Ortiz, la madre del alcalde, prometió resolver y no lo hizo).
EN SU segunda campaña para alcaldesa, bajo las siglas del PAN, la doctora Maki Ortiz, a pregunta de este servidor (en entrevista de prensa en el hotel Hilton, de la colonia del Prado), sobre si “ella haría la obra que no se ve”, es decir, “si reemplazaría” la tubería de la red de drenaje, (con los un mil 500 millones) que dijo hacían falta, se comprometió a luchar con tenacidad y perseverancia, para acabar con los problemas de las aguas negras, cuyos recursos prometió conseguir “tocando puertas en el Banco de América del Norte”, pero ese buen propósito de la oportunista e irresponsable madre de Carlos Peña Ortiz, solo quedó en buenas intenciones, porque hoy que gobierna Reynosa el hijo de Maki, “las familias, siguen padeciendo el mismo malestar, pero de manera mucho ms aguda”.
CARLOS PEÑA, (no es el hijo desobediente), porque si adoptara esa posición frente a su madre, bien no le iría. Hacemos hincapié en esta relación de madre e hijo en el ámbito político, porque, para nadie es desconocido que, “todo lo que se hace o decide en el Ayuntamiento de Reynosa”, es orden de “la mamá del muchacho”. Y aunque a las familias de Reynosa, “el Makito” quiera (venderles la idea de que, nada de esto es cierto) y que el es muy propio en sus actuaciones y decisiones, dijeron por ahí en los pasillos de presidencia “eso nadie se lo creería”, porque hasta “una gran parte, no todos”, de los agachones y sometidos síndicos y regidores”, tienen que obedecer lo que Maki Ortiz ordene, eso en el municipio “es un secreto a voces”.
POR ELLO, Reynosa, sigue en manos de “esa mujer que mantiene ávida su sed y hambre al dinero ajeno”, eso se vislumbra a leguas. Y precisamente, esa postura insaciable, fue la que, orilló a Maki a (tener que hacer a su hijo candidato a alcalde) por el partido Morena, sin importarle haber invertido (dicen) 5 millones de dólares para lograr su objetivo político, gracias a la buena disposición ($$$) de Mario Delgado Carrillo. Y consecuentemente aprovecharse de la imagen del presidente de México Andrés Manuel López Obrador, para que su hijo CARLOS VICTOR PEÑA ORTIZ, saliera airoso y ella, (la doctora) MAKI ORTIZ, seguir teniendo en sus manos los manejos financieros del gobierno municipal, eso es evidente.
POR LO anterior, queda claro que, “si en el Ier Informe de Gobierno del joven títere, Carlos Peña”, se habló de que, Reynosa, es la mejor ciudad de Tamaulipas, eso no es porque, el Ayuntamiento la tenga en esa preponderante posición, porque en obra pública, llámense red de agua potable y alcantarillado, alumbrado público, en salud y en otros muchos rubros, hay un triste panorama de evidente abandono, repito, en las colonias y ejidos, debido a que, “el dinero público, no se invierte en las reales necesidades de la ciudad”. Incluso a las familias de los sectores proletarios o vulnerables, “no se les escucha, ni se les atiende como bien lo merecen”, porque la misma Maki dice “solo vienen a pedir”, que lamentable, ¿verdad?
PARA CONCLUIR, les diré que, la aguda situación de tangible abandono, por la que atraviesan las sufridas familias de Reynosa, eso se lo deben a sus propios gobernantes, detalle por el cual se refrenda HOY que, “CARLOS Y SU MADRE, LE HAN FALLADO A REYNOSA”.
Por hoy es todo y hasta mañana.