Alejandro Mares Berrones
“El fentanilo es un reto mundial, tenemos una colaboración de más de cien países, que están trabajando con nosotros, para frenar la entrada de precursores a Estados Unidos y a México”, dijo el embajador Ken Salazar.
En una conferencia conjunta con el gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal, desde el Consulado General de los Estados Unidos en Matamoros, el embajador Ken Salazar, recordó la reunión de alto nivel que sostuvieron el secretario de estado, Antony Blinken; el Fiscal General, Merrick Garland; el secretario de seguridad interna de EU, Alejandro Mayorkas y la asesora de la Casa Blanca sobre seguridad nacional, Elizabeth Sherwood Randall; con su contra parte mexicana, encabezada por el Presidente Andrés Manuel López Obrador, la canciller Alicia Bárcena y otros funcionarios.
Ken Salazar reconoció que las armas vienen de los Estados Unidos y que están matando a mucha gente por ambos lados de la frontera, aseguró que se ha reducido bastante el flujo de armas de los EU que llegan a México.
“Hace un año que se firmó la ley, ya es crimen grave traficar armas, ahora tenemos 9 unidades de ATF, trabajando en el lado estadounidense y operativos de otras agencias, tratando de hacer todo para parar ese flujo de armas que vienen de los Estados Unidos a México”.
Puntualizó que se trabaja de la mano con el gobierno mexicano, con las diferentes agencias, para cuando un arma se usa en un homicidio, tener la información de donde salió.
Comparó la seguridad de EU y México, con las relaciones comerciales que sostienen ambos países:
“Tiene que ser un esfuerzo compartido, bajo el respeto de la soberanía de México, nosotros somos los huéspedes aquí, cuando estoy en Tamaulipas soy el huésped del gobernador Villarreal, del gobierno mexicano y eso es parte de trabajar por la solución de la seguridad”.
Sobre los retos-problemas que enfrentan EU y México, el embajador Ken Salazar enfatizó “que la transformación que se requiere es grande” y puso de ejemplo, lo de las armas, que ahora en los Estados Unidos ya es un crimen grave traficar con ellas.
El embajador, movió sus brazos, como si con ellos sostuviera un arma larga y dijo:
“Si alguien de los EU comprara un arma de calibre .50 milímetros o un arma larga y la mandara a México, estaría cometiendo un crimen grave, antes ni se conocía; ahora eso ha cambiado, esto ha sido en el último año, fue un asunto de mucho trabajo, para que el Congreso hiciera esos cambios a las leyes de los Estados Unidos”.
Agregó que el Presidente Biden, ha puesto por primera vez un fiscal que se encarga del ATF, “llevamos un trabajo de la mano con él, trabajando con la Fiscalía de México y las otras agencias y tenemos optimismo de que vamos a solucionar estos problemas”.
Ken Salazar, también opinó sobre las restricciones que el gobernador de Texas, Greg Abbott, ha puesto en los cruces fronterizos, sobre revisiones mecánicas a los tracto-camiones que llevan mercancías de México, hacia el lado americano:
“Lo del gobernador de Texas, miren conozco yo a todos los gobernadores del lado de México y de EU, todos tratando de resolver problemas, pero en lo de Texas es más difícil, ¿por qué?, no sé; pero la realidad de esto, es que lo de la migración no se debería de hacer un juego político, este sufrimiento que vemos, es una crisis humanitaria, ambiental, hay que encontrarles solución, es todo lo que voy a decir”.
Ese 17 de octubre de 2023, desde el Consulado de EU en Matamoros, el gobernador Américo Villarreal, también opinó sobre la seguridad, dijo que el presidente AMLO hará un recorrido por la frontera de Tamaulipas, para verificar los trabajos que se están haciendo en las 5 adunas de la entidad y de la modernización que se realiza en los 15 puentes internacionales.
El gobernador resaltó que estas aduanas contarán con equipo de Rayos X, Gamma, binomios caninos, con ello brindarán una mayor seguridad y eficiencia en los intercambios comerciales, para evitar el tráfico de drogas y armas.
También habló del desarrollo económico, que realiza la empresa americana Fortes, con el gasoducto y la instalación de plataformas en el océano, frente a las costas de Aldama y en tierra, la planta de licuefacción en Altamira, que llevará gas a Europa, con una inversión de 4 mil millones de dólares.