Alejandro Mares Berrones
El hecho de que Donald Trump, haya dicho que México está petrificado ante los cárteles de las drogas y que estos pueden quitar al presidente en dos minutos, tuvo su rechazo por parte de la doctora Claudia Sheinbaum, quien le dejó claro al republicano que nuestro país ha avanzado en el combate a la inseguridad.
A nuestra presidente electa, le faltó decirle a Trump, que allá en los Estados Unidos, le basta a un solo ciudadano, adquirir un rifle y disparar contra su presidente para quitarle la vida, en este caso la oreja; claro, por respeto, eso no le dijo la doctora Claudia.
Y es que Trump, ya no la tiene nada fácil, con la bajada de Joseph Biden de la contienda electoral y la muy probable postulación de la vicepresidenta Kamala Harris por el partido demócrata, el republicano ha enfocado sus baterías para darle una sacudida a México con sus declaraciones y captar aún más, la atención de los votantes mexicoamericanos.
Si Trump, no hubiese atacado a Joseph Biden, tachándolo con una serie de calificativos, como lo fue el tema de su edad, lo más seguro que el todavía presidente de los EU, se convertiría en el candidato demócrata y Donald tendría a un oponente frágil y débil en su imagen, pero el mismo republicano provocó que Kamala Harris, sea ahora su rival.
Trump criticaba a Biden de ser un anciano, pero ahora el vetusto es él; Kamala es mucho más joven, no solo le dará la pelea electoral, lo exhibirá de “delincuente”; por su parte el republicano se defenderá como ha sido su estilo, con una serie de calificativos, la tachará de ineficaz, de no haber dado muy buenos resultados como vicepresidenta, así en ese sentido y con esa temática se va a dar la guerra entre los presidenciables a gobernar los Estados Unidos.
A Trump, no le bastó con el golpe político que dio al decir, que al presidente de México, los narcos lo quitan en dos minutos, el republicano se dejó caer, asegurando que de llegar a la Presidencia de los EU, impondrá fuertes aranceles a los vehículos que se produzcan en nuestro país.
Ese golpe fue un gancho al hígado, directo a la economía de México, inmediatamente el presidente Andrés Manuel López Obrador, le mandó un escrito, explicándole las consecuencias para ambas naciones de tomar esa decisión; claro, que la misiva ya le llegó a Trump, ahora solo falta la respuesta del republicano, la que de seguro será más polémica o de plano, pasará hacer una carta más a Eufemia.
En fin, el punto es que Trump, nos está golpeando, ya es un cadillo para México, y si gana la presidencia de los Estados Unidos, le dará muchos dolores de cabeza a AMLO y posteriormente a la doctora Sheinbaum.
Por lo pronto, el solo anuncio que hizo Trump, de decir que aumentará los aranceles a las empresas que produzcan vehículos en la República Mexicana, ese simple hecho, provocó que Elon Musk, congelara las inversiones de Giga México, que arrancaría la producción de autos eléctricos en Nuevo León.
Musk se va a esperar a los resultados de las elecciones de los Estados Unidos; aunque también se ha dicho públicamente que el multimillonario, es uno de los principales patrocinadores de Donald Trump.
Estas acciones y a la vez declaraciones del republicano, dejan claro, que de ganar la elección, le estará marcando la agenda a nuestro país en muchos aspectos como lo son la migración, el comercio binacional y la seguridad en temas que tengan que ver con cárteles de la delincuencia organizada, que según él, “en dos minutos” pueden quitar al presidente de México, así de gruesas han sido sus palabras.
