Cabeza de Vaca, tendrá dos senadores, su hermano Ismael y su cuñado José Ramón

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Alejandro Mares Berrones

A 20 días de que concluyan las campañas políticas en Tamaulipas, por la elección extraordinaria a la senaduría que dejó vacante el fallecimiento de Faustino López, ninguno de los tres candidatos, despiertan el ánimo de los electores para que salgan a las urnas.
El desánimo es palpable, el INE asegura que la participación electoral será a lo mucho del 30 por ciento, de una lista nominal de un poco más de 2.7 millones de electores; sin duda, el abstencionismo será el ganador.
Tan triste, está la elección en Tamaulipas, que el partido de Dante Delgado, Movimiento Ciudadano, decidió no postular a nadie, después de que descubrió que su ex candidato a la gubernatura, Arturo Diez, pretendía vender dicha postulación a Rigoberto Ramos, un ex diputado panista.
Dante opto por no desgastarse y ahorrar recursos, la ley electoral no lo obliga a postular candidato cuando se trata de una elección extraordinaria y sabe, que las canicas, ahorita en Tamaulipas las tiene Morena.
La decisión de Dante, ha partido el voto tamaulipeco en tres, es decir, la coalición “Juntos Haremos Historia”, que la integran Morena y PT, que postulan a José Ramón “JR” Gómez Leal, hermano de Mariana de los mismos apellidos y esposa del ex gobernador Francisco Javier García Cabeza de Vaca.
La Alianza Va por Tamaulipas, que la integran el PAN-PRI-PRD y que postula a la diputada local Imelda Sanmiguel, política del círculo cercano a los Cabeza de Vaca.
El otro candidato a la senaduría es Manuel Muñoz Cano, este va por el partido Verde y presuntamente se le salió del corral a Américo Villarreal.
El gobernador no le dio ningún “hueso”, ni una secretaría en su gabinete; así que su postulación es una especie de desobediencia política, al menos es lo que aparenta, aunque la jugada sea restarle votos a la alianza “Va por Tamaulipas”.
Los candidatos a la senaduría vacante, arrastran negro pasado y la sombra de amistades corruptas, por ejemplo, en el caso de Imelda Sanmiguel, ella es diputada local con licencia, solo hace campaña en Ciudad Victoria y en Tampico, ni en su natal Nuevo Laredo se le ha visto activa.
Pertenece al círculo de poder de los hermanos Francisco e Ismael García Cabeza de Vaca, quienes son sus padrinos políticos; la apoyaron para que llegara a regidora y secretaría de obras públicas en Nuevo Laredo y en 2019, la apadrinaron para la diputación local.
De profesión arquitecta, a Imelda Sanmiguel, le ha ido muy bien en los bienes raíces desde que se metió a la política, sobre todo en el sexenio de Cabeza de Vaca, hoy es la candidata al Senado, pero sin despertar simpatías, ni al interior de los partidos que la postulan.
La postulación de Manuel Muñoz Cano, es para aparentar jugarle las contras al candidato del gobernador José Ramón “JR”, pero la realidad es que su participación se concreta a restarle votos al PAN-PRI y PRD.
A Manuel le pesa la sombra de su padre Manuel Muñoz Rocha, aquel político que fue acusado del crimen de Francisco Ruiz Massieu, cuñado de Carlos Salinas de Gortari.
Sobre el candidato del Verde a la senaduría, obra el hecho de que este fue el coordinador de campaña de Rodolfo Torre Cantú, acribillado a balazos y como consecuencia de este crimen, fue que el exgobernador Egidio, usufructúo el poder.
El propio Cabeza de Vaca, acusó a Manuel Muñoz Cano, de que este sabía que asesinarían a Rodolfo Torre Cantú; “porque se bajó de la camioneta antes de que ex candidato fuera asesinado”.
Manuel, durante todo el sexenio de Egidio, se autoexilio del estado, el ex gobernador priista, responsabilizó al PRI por la muerte de su hermano.
En esta elección, queda claro que el único que saldrá ganando es Cabeza de Vaca, quien ahora tendrá dos senadores; su hermano Ismael y su cuñado José Ramón.