*El predio donde esta asentado el “emporio educativo de Las Camelias”, es propiedad del Municipio y se buscará una manera de regresarlo al Ayuntamiento, ya sea revirtiendo los derechos; que otorguen becas a hijos de obreros, de campesinos y de madres solteras o que paguen una aportación del 8 por ciento.
Jorge Caleb
“Lo que encontramos de antecedentes legales es que el predio en el que esta asentado el Colegio Oralia Guerra de Villarreal y la Universidad Nuevo Santander, es propiedad municipal porque la donación nunca se concretó y el Congreso nunca emitió el decreto correspondiente” afirmó el secretario del Ayuntamiento, Efraín Ensignia Marín.
En ese sentido adelantó que se buscará la manera de hacer valer la propiedad, pero como ya hay colegios privados ya no puede aplicarse la donarse.
El Colegio Oralia Guerra de Villarreal y la Universidad Nuevo Santander es propiedad del clan Héctor Escobar Hernández “La Camelia Grande”, junto con su hijo Héctor Escobar Salazar, “La Camelia Chica”, hoy candidato electo del PAN por el distrito 10, que es impugnado por la diferencia de 100 votos contra el candidato de morena, Miguel Angel Frías.
Las Camelias y toda su familia que juntos con Emilio Villarreal Guerra, fundaron a través de un patronato, “el emporio educativo”.
“Lo que vamos a hacer es ver un método en el que podamos llegar a un arreglo porque la propiedad sigue siendo del municipio, pero tendremos que ver una posibilidad de que el municipio recupere algo.
Agregó que puede haber muchas posibilidades, una de ellas es que se condone el pago de cuotas, pero también reconoció que es una cuestión sumamente complicada.
En el informe que se rindió de la comisión el Segundo Síndico, coordinador de la JUCOPA, Isidro Vargas Fernández, se estableció que de los aproximadamente 90 propiedades municipales localizadas solo 46 cuentan con sus escrituras y restan 44.
También dijo que por diversos Comités de Participación Social se recibieron 20 quejas de predios municipales afectados por particulares y que estan bajo análisis.
El secretario del Ayuntamiento mencionó también que la decisión que se tome tendrá que tomar en cuenta a los estudiantes y que no sean afectados en sus respectivos estudios.
“Tampoco sus propietarios pueden argumentar que por el tiempo transcurrido se han creado derechos, porque por ley no se crean derechos en el patrimonio municipal”, indico Efraín Ensignia.
Lo que ordinariamente procede en este caso es que se restituya al municipio esa área verde que legalmente es del ayuntamiento, pero insistimos, como no queremos afectar a los estudiantes, vamos a ver con la comisión la manera de tener algún arreglo o convenio.
También, el segundo síndico, Isidro Vargas Fernández, comentó, que habría que ver posibilidades como la entrega de becas para el municipio o en su defecto, como lo dice la ley, cobrar el 8 por ciento de los ingresos de la institución educativa.
El antecedente
Fue el cronista de la ciudad y encargado del archivo histórico de Matamoros, Andrés Cuellar Cuellar, en entrevista en el mes de abril, para este periódico El Norteño, que reveló lo que él denominó como una “truculenta historia”, los antecedentes históricos del Colegio Oralia Guerra de Villarreal y de la Universidad Nuevo Santander, y de cómo se hicieron del área verde de la colonia la Encantada, los Escobar, conocidos ya con el mote de “Las Camelias”.
Y hoy al Héctor Escobar Salazar, diputado electo impugnado por morena, también se le conocerá si es que el Tribunal electoral le sostiene su triunfo, como “El Diputado Gorgojo”, por de conservar su constancia de mayoría esta sería gracias al pinta de casas, a la entrega de tinacos y principalmente a las miles de despensas que entregó el gobierno del estado, a favor del PAN para coaccionar el voto de los matamorenses.
Andrés Cuellar, recordó que en un inicio en la primera administración de Jorge Cárdenas González en la época de los 80, se otorgó la donación de una parte de esa área del Fraccionamiento la Encantada, pero para la Universidad de Matamoros.
Pero que posteriormente y con la ayuda de su ex socio Emilio Villarreal Guerra, (de quien se decía era la pareja de Héctor Escobar Hernández) entonces hermano del gobernador Américo Villarreal se fue apoderando de más área.
El periódico El Norteño obtuvo información tanto de la Plataforma de Transparencia, como del Registro Registral y Catastral de Tamaulipas, las actas de Cabildo, donde se hizo una donación leonina y malévola y posteriormente una ampliación para el Colegio Oralia Guerra de Villarreal, en la administración del corrupto ex alcalde panista Ramón Antonio Sampayo Ortiz, en la época de los 90, amigo de los Escobar.
La donación estaba destinada al fomento de la educación sin fines de lucro, sin embargo, nunca se escrituró y el Congreso del estado jamás apoyó el proceso de donación y ampliación.
Queda claro que el predio donde está la Oralia Guerra de Villarreal y la Universidad Nuevo Santander, es del pueblo de Matamoros, no de “Las Camelias” y tendrán que regresarle al pueblo lo que es del pueblo, por ratas…
Estas instituciones son de las más caras de la ciudad, la titulación la cobran en 27 mil y hasta 35 mil pesos, están brutos para la lana, van a tener que regresarle al pueblo de Matamoros, mucho de lo que le han robado y con lo que se han enriquecido…
Los estudiantes, los padres de familia, el ayuntamiento y el pueblo en general son los verdaderos dueños de ese lugar, la escuela la deberán de entregar intacta por mandato popular, es cuestión de que los Escobar sean echados fuera y los mismos padres de familia y alumnos decidan cambiar de directores de facultades rector y patronato…
Esto está a punto de suceder porque cuando se les cedió el terreno les impusieron condiciones que ante la ley no han cumplido…que rindan cuentas los Escobar, ¡Al pueblo lo que es del pueblo!
